El entusiasmo alrededor de la inteligencia artificial generativa no se está traduciendo, necesariamente, en retorno para las empresas. El informe State of Responsible AI in Financial Services 2025, elaborado por Corinium Intelligence y patrocinado por FICO, muestra un cambio claro en las prioridades de inversión de los líderes C-Suite: la IA generativa ocupa apenas el cuarto lugar entre las tecnologías con mayor impacto esperado en el ROI durante los próximos 18 meses, con solo 40% de menciones.
En contraste, los sistemas de Inteligencia de Decisiones encabezan el ranking…según el 60% de los Chief Analytics Officers (CAOs) y Chief AI Officers (CAIOs), los ejecutivos responsables de analítica e inteligencia artificial dentro de las organizaciones. Estos sistemas se caracterizan por su enfoque en la explicabilidad, la trazabilidad y la integración directa con la lógica del negocio, funcionando como un puente entre los modelos avanzados de IA y procesos críticos como crédito, prevención de fraude, gestión de riesgo o inversión. Para los líderes, el valor no está en experimentar, sino en mejorar decisiones que ya impactan resultados.
El segundo lugar lo ocupan los estándares de IA Responsable, con 57% de las respuestas. Este dato subraya un punto clave: la IA genera valor cuando opera bajo principios claros de gobernanza, supervisión y rendición de cuentas. La confianza se vuelve un habilitador del retorno, especialmente en industrias donde los errores, sesgos o decisiones opacas tienen consecuencias financieras y reputacionales.
En tercer lugar aparecen los modelos de lenguaje específicos por dominio, con 54% de menciones, superando a los modelos generalistas. La preferencia por soluciones entrenadas para contextos concretos refleja una búsqueda de mayor precisión, control y alineación con necesidades reales del negocio, en lugar de herramientas amplias pero difíciles de gobernar.
Scott Zoldi, Chief Analytics Officer de FICO, resume este cambio de paradigma al señalar que el valor empresarial solo se materializa cuando las organizaciones comienzan por definir el problema de negocio y luego evalúan cómo la IA puede convertirse en una herramienta para resolverlo. En la misma línea, Paola Leites de Moraes, de Corinium Intelligence, apunta que el sector está entrando en una etapa de madurez, donde la rendición de cuentas y la supervisión pesan más que las inversiones guiadas por el hype.
El mensaje del informe es claro: el ROI no está en la novedad tecnológica, sino en integrar la IA de forma segura, explicable y alineada con los procesos centrales del negocio. Para el ecosistema B2B, esta lógica es especialmente relevante: la tecnología que genera valor es la que se conecta con la operación real y mejora la toma de decisiones, no la que se adopta solo para seguir tendencias.



































